Control | Sanitas

En el Perú, más de 4,7 millones de personas son adultos mayores y, de acuerdo con el INEI, cerca del 79 % convive con algún problema crónico de salud. Entre las afecciones más frecuentes se encuentran la hipertensión, la diabetes, la artrosis, el deterioro cognitivo y los trastornos sensoriales, condiciones que pueden afectar la autonomía si no se detectan de manera temprana.

La Dra. Julissa Mogollón, especialista en geriatría de Sanitas Consultorios Médicos, resalta que llegar a los 60 con vitalidad depende, en gran medida, de la prevención:

“Los chequeos no solo permiten identificar enfermedades silenciosas como la hipertensión, la diabetes o ciertos tipos de cáncer, también contribuyen a reducir complicaciones y a mejorar la eficacia de los tratamientos”, explicó.

Chequeos médicos esenciales después de los 60

  • Chequeo cardiovascular: control de presión arterial, electrocardiograma y perfil lipídico (una vez al año).
  • Glucosa y diabetes: análisis de glucosa en sangre anual; cada 3 a 6 meses en personas con riesgo.
  • Examen visual: cada 1 a 2 años para prevenir cataratas, glaucoma o degeneración macular.
  • Chequeo auditivo: cada 1 a 2 años, o antes si aparecen cambios en la audición.
  • Densitometría ósea: cada 2 a 3 años para diagnosticar osteoporosis y prevenir fracturas.
  • Evaluación oncológica: colonoscopía (cada 5 a 10 años), mamografía (cada 2 años en mujeres), examen de próstata anual (en hombres) y revisión dermatológica.
  • Salud bucal: revisión odontológica cada 6 a 12 meses para prevenir caries y enfermedades periodontales.
  • Chequeo médico general: anual, incluyendo peso, talla e índice de masa corporal.
  • Pruebas renales y hepáticas: una vez al año, especialmente en personas polimedicadas.
  • Vacunación preventiva: mantener al día las dosis de influenza, neumococo, tétanos y otras según criterio médico.

La prevención como inversión en bienestar

La especialista recalca que estos controles deben verse como una inversión en calidad de vida:

“Un chequeo oportuno puede marcar la diferencia entre vivir con limitaciones o mantener una vida plena y activa”, sostiene Mogollón.

Con un enfoque preventivo y hábitos saludables, los adultos mayores pueden disfrutar esta etapa con energía, independencia y plenitud.